¿Cuándo hay que ir a la matrona?

¿Cuándo hay que ir a la matrona?

El embarazo es una etapa maravillosa y transformadora en la vida de una mujer, que requiere de cuidados especiales tanto para ella como para el bebé. Asegurar una gestación saludable y sin complicaciones es fundamental, y esto implica una atención médica constante y adecuada a lo largo de los nueve meses y en el momento del parto.

Primeros Pasos: Confirmar el Embarazo

Si experimentas un retraso en tu menstruación, realiza un test de embarazo en casa. Si el resultado es positivo, programa una cita con tu médico de cabecera para corroborarlo y recibir orientación inicial.

¿Cuándo Ir al Ginecólogo?

El proceso puede variar según la región, pero generalmente comienza con una visita al médico general o de familia, quien te remitirá para una primera analítica y confirmará tu estado. Posteriormente, serás derivada al ginecólogo para un chequeo inicial y las pruebas necesarias, como el cribado de síndrome de Down y la detección de defectos del tubo neural. 

Es crucial acudir al médico tan pronto como sospeches que estás embarazada para recibir las indicaciones alimenticias y de cuidado necesarias desde el principio.

Primera Visita a la Matrona

La primera visita a la matrona debe realizarse antes de las 12 semanas de gestación. En esta consulta inicial, la matrona se dedicará a conocerte personalmente, responderá a todas tus preguntas y te proporcionará información vital sobre el embarazo. Esta atención personalizada es fundamental para establecer un plan de cuidados adecuado a tus necesidades.

Seguimiento del Embarazo

Después de la primera visita, las consultas con la matrona se programarán aproximadamente cada cuatro semanas hasta la semana 36 del embarazo. A partir de entonces, las visitas serán cada dos semanas hasta la semana 38, y luego semanalmente hasta el nacimiento del bebé.

Preparación para el Parto

Además de las consultas médicas, es recomendable comenzar las clases de preparación al parto antes de la semana 28. Estas clases son esenciales para preparar tanto a la madre como a sus acompañantes para el momento del parto y el cuidado del recién nacido.

Visitar a la Matrona sin Estar Embarazada

Es importante recordar que las visitas a la matrona no se limitan solo al período del embarazo. Después del parto, también es conveniente programar una consulta con la matrona. Estas visitas postparto son cruciales para ayudarte a recuperar el tono muscular en el abdomen y el perineo, además de orientarte en los cuidados necesarios para ti y tu bebé, especialmente si estás dando el pecho.

Beneficios de las Consultas Postparto

 

  1. Recuperación Física: La matrona te ayudará a realizar ejercicios para fortalecer los músculos abdominales y del perineo, esenciales para una recuperación postparto saludable.

  2. Lactancia: Recibirás orientación y apoyo sobre la lactancia materna, asegurando que tanto tú como tu bebé se adapten bien a este proceso.

  3. Prevención de la Depresión Postparto: La matrona puede brindarte apoyo emocional y recursos para prevenir y tratar la depresión postparto, una condición que puede afectar a muchas mujeres tras el nacimiento de su bebé.

  4. Cuidado del Bebé: Te ofrecerá consejos prácticos y recomendaciones para el cuidado de tu recién nacido, desde la alimentación hasta la higiene y el sueño.